Ahora huachigas en Hidalgo
Florentino Peralta
05-24-2021
Al robo de gasolina en Hidalgo se suma ahora de manera importante el de gas LP, pues durante los tres primeros meses de 2021 las tomas clandestinas crecieron 166.6 por ciento con relación al mismo periodo, pero de 2020.
Lo anterior, de acuerdo al informe denominado “Tomas clandestinas ductos de hidrocarburos y gas LP primer trimestre 2021” presentado por el Instituto para la Gestión y Vinculación Municipal (IGAVIM) hace algunas semanas.
Aunque Puebla ocupa el primer lugar en México por este tipo de robo, Hidalgo presenta el mayor crecimiento porcentual, pues de enero a marzo de 2021 cada 11 días y ocho horas se identificó una toma clandestina de gas LP.
Las tomas detectadas todavía no son numerosas, pero implican que los traficantes de hidrocarburo se diversifican y se extienden en territorio hidalguense ante el fracaso de la estrategia nacional para el combate al huachicol.
El fenómeno del llamado huachigas tiene presencia ya en Cuautepec, municipio azotado por el robo y compra-venta de hidrocarburo, Tulancingo, Actopan e Ixmiquilpan, donde existen terrenos por donde cruzan ductos de gas.
A ese tipo de predios, ubicados en áreas despobladas, les denominan “encierros”, según empresarios gaseros que han tenido que llevar a cabo sus propias investigaciones al respecto, luego de resentirse ya económicamente.
La operación consiste en abastecer unidades cilindreras y pipas de gas en los llamados “encierros”, que a su vez llenan camiones más grandes que circulan por las calles a plena luz del día para repartir sin supervisión alguna.
De todo esto y de las gaseras sin registro que han brotado, curiosamente se da cuenta mucha gente: el vecino, el comprador, la persona de a pie, pero pasa desapercibido para autoridades municipales, estatales y federales.
ESTRATEGIA FALLIDA
La estrategia nacional contra el robo de hidrocarburo, esa que empezó con la escasez del combustible en enero de 2019, es ya un acto fallido. Durante el primer trimestre de 2021 Hidalgo se ratificó como el puntero en tomas clandestinas con mil 151 detectadas en 21 de sus 84 municipios, un promedio de 12 cada día. Ahora la nueva amenaza es el robo de gas, cuyos traficantes abren rutas de distribución y roban mercado a los empresarios establecidos, muchas veces con los que alguna vez fueron sus repartidores. Al desatino del gobierno federal se suma el contubernio social, que por ahorrar unos pesos compra robado.
コメント